Ya no me siento triste. Mucho menos, con dudas. Ahora, todo en mi vida ha dado un giro de 180 grados. Mi vida sentimental está mejor que nunca, mi hijo crece feliz, en mi trabajo las cosas están bien y, en mi verdadera vocación, he encontrado el rumbo. Regresé como prometí. Mi post anterior que decía lo mal que me había ido ahora es parte de mi pasado. Con esa pelea contra Ccanto, muchas cosas se me pasaron por la mente... hasta el retiro. Tengo 30 años, creo que he logrado mucho en el Muay Thai y el Kickboxing para mi país, tanto como para pensar en colgar los guantes.. pero por qué hacerlo? No hay motivo. Gané la pelea, peleando mal, pero gané. Y ahora, apenas terminaba de luchar con Ccanto, ya se hablaba de la revancha que se concretó por fin. Decidí regresar mentalizado en ser el mejor nuevamente, como en mis viejos tiempos. Gracias a Dios, lo estoy consiguiendo. El 19 de fabrero reaparecí contra Ángelo Pinedo, un peleador respetado por ser noqueador y por su gran estatura. Le gané peleando bien. Una patada de izquiera entró en las costillas de lleno y estuve a punto de nokearlo en el primer round. Sin embargo, Pinedo había subido a pelear y así lo hizo. Inclusive, recibí de lleno en el plexo una de sus rodillas voladoras, tan duras, que por un momento pensé que me había nokeado. Sin embargo, la aguanté hidalgamente. Gané y la confianza regresó. Mis entrenadores, mis amigos y mi familia disfrutaron mucho la pelea. Luego, a las tres semanas, venía la revancha contra Víctor. Ese fue un cuento aparte. Yo estaba enterado que mi rival había estado encerrado varías semanas. Su idea era ganarme, dejarme K.O. y llevarse toda mi gloria con él. Estaba mentalizado, decidido y dispuesto a correr cualquier riesgo con tal de ganarme. Gracias a Dios, nuevamente me impuse. Le gané, peleando bien. Algunos dicen que no debimos irnos al extra round de desempate. Otros, comentan que en el desempate lo apabullé y definí una situación difícil basado en mi experiencia. Lo cierto es que esta victoria me dio la oportunidad de recobrar mi camino. De volver a mentalizarme al punto de pensar que ahora, quien sigue es Frank Paredes, a quien también voy a ganar. Yo lo dije... uno a uno caerán porque EL LOBO SOLITARIO Y SU CACHORRO NO PERDONAN.
Ccanto
Pinedo
miércoles, 1 de abril de 2009
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